Harpo - Valladolid

Podría decir muchas cosas pero lo mejor es…no vayáis,de verdad. Es mejor una máquina expendedora de 24h. No volveré ni aunque me paguen.

Después de hacer una reserva a las 21:30 de la noche y ser puntuales en ella, a las 23:15 aún no había llegado ningún plato a la mesa, viendo como mesas que habían llegado más tarde estaban cenando. Habíamos hecho una reserva para 5 personas, primero nos intentan colocar en una mesa de 4 personas sin guardar la distancia de seguridad entre las diferentes mesas del restaurante. Después de informarles sobre este hecho, nos colocan en una mesa para 5 personas siendo las 23:15 de la noche y no nos habían dado de cenar, llevando casi dos horas esperando la cena. Pienso que ha sido por advertirles de los protocolos covid que no estaban siguiendo. No lo recomendaría.

Las pizzas estan buenas pero en esta situación se agradecería mucho que la camarera se pusiera, de verdad, la mascarilla.

Atención pésima por parte de la camarera pelirroja, muy arrogante, bastante chula y prepotente, y muy poco respetuosa con el cliente. No está capacitada para trabajar cara al público. Una lástima porque la comida era bastante aceptable... NO VOLVERÉ Y NO LO RECOMENDARE. Pd.: durante la crisis del covid19 el uso de la mascarilla por parte de los camarer@s al servirte no es opcional... otro punto negativo si cabe a su inaceptable actitud.

Unas pizzas espectaculares, pero la atención mas pésima no puede ser. Vale que la situación actual nos supone hacer cambios en nuestros negocios, pero llevamos ya casi dos semanas con las terrazas abiertas para saber la afluencia de publico tenéis y el personal que necesitáis.... Ya no vamos a hablar de que os pasáis las medidas de prevención por el forro, tenéis más mesas que habitualmente, no es que sea el 50 es que hay más mesas que antes, las camareras con la mascarilla por la barbilla o directamente quitada, dando besos a los clientes, sin gel hidroalcoholico... y como digo, casi dos semanas después de que las establecimientos puedan abrir sus puestas. Pero vayamos a la atención al cliente: Al sentarnos nos dice que si llega alguien para cenar nos tendremos que ir, sin saber si nosotros tenemos intención de cenar o de tomarme 20 cañas, y si tenéis la mesa reservada no sentéis a nadie en ella no? Pedimos dos cañas y una coca cola y trae tres cañas, a los 5 minutos vuelve y trae la coca cola. Pedimos la carta para cenar, pedimos dos pizzas y a los 15 minutos vuelve la camarera y nos vuelve a tomar nota de las mismas dos pizzas. Cuando nos trae las pizzas la pedimos otras dos cañas y una coca cola más, cuando nos trae la bebida ya nos habíamos comido las pizzas, y para colmo se vuelve a confundir y no trae la coca cola, pero no la trae ahora ni nunca, no llego a la mesa. Pedimos la cuenta, durante casi 1 hora la volvemos a pedir otras 3 veces, y cuando ya se digna a traernos la cuenta, nos dice que no nos pongamos gallitos y no alcemos la voz cuando ella lleva desde que llegamos con una chulería y prepotencia fuera de lugar. Nos amenaza diciendo que va a llamar al jefe y que se lo digamos, pedimos una hoja de reclamaciones y se la bajan los humos (sin mascarilla por cierto, tocándonos en el hombro y acaba hablando apoyada en la mesa) Y si, no nos fuimos sin pagar porque tenemos un poco de dignidad. RESUMIENDO: camarera chula, prepotente y 0 profesionalidad. No volveremos.