El Porche - Sotosalbos

Soy del barrio y aunque conocía la cafetería nunca había entrado porque yo me movía por otra zona hasta que un día me decidí a entrar y ya se ha convertido en mi cafetería favorita. De momento sólo he ido a desayunar, a tomar algunas tapas y alguna copa. Destaco la calidad de la cocina, buenísimas las tapas sobre todo la croqueta de puerros y roquefort y la empanada de pollo, pero me consta que tienen muy buena cocina y todo está riquísimo. No he mirado la carta pero creo que se puede comer menú ó en plan bocata. El servicio es muy bueno, los camareros muy amables, la cafetería es muy bonita y acogedora por dentro, me llama la atención la limpieza y el orden que tienen siempre, está impecable incluído el baño, no verás un papel en el suelo nunca, lo cual es un plus, además tiene una gran terraza que se está fenomenal sobre todo en verano. Para mí es una de las mejores cafeterías que hay en el barrio con diferencia. Sólo lamento no haber ido antes. Le doy 5 estrellas pero se merecen muchas más y por supuesto lo recomiendo 100% a todo el mundo.

La comida es espectacular y a un precio muy accesible. Recomiendo el cachopo y el bacalao a la portuguesa.

Se come muy bien en este restaurante, el personal te trata de maravilla y es muy barato. Las tostadas de desayuno son deliciosas. Recomiendo probar todo lo que tienen en este restaurante porque es excelente.

Hotel moderno y precioso en el mejor barrio de noche y gastronomía, cerca de los monumentos y buen chef

Ese día estaba nevando y el estado de la N-110, sin ser malo, se empezaba a complicar. Vivo a unos 5 kilómetros de Sotosalbos, el pueblo en el que se encuentra el restaurante, y lo habré visitado media docena de veces. Merece la pena hacer una parada, sobre todo por su iglesia románica. Supongo que si el tiempo hubiese acompañado hubiera habido más gente por allí, pero ese día el pueblo estaba bastante desangelado, y el restaurante sólo tenía una mesa ocupada. El trato fue amable y cercano. La carta era muy sencilla y con pocas referencias. No nos ofrecieron la carta de vinos, solamente el vino de la casa, un ribera normalito a buen precio. De 1º comimos unas sopas castellanas que estaban bastante bien. De 2º chuletillas de cordero y entrecot, ambas cosas a buen nivel aunque el entrecot algo escaso. Muy buenas las patatas fritas, frescas y recien hechas, lo que empieza a ser difícil de encontrar. Quisimos una más de chuletillas y no les quedaban, aunque tuvieron el detalle de sacarnos las 3 que les quedaban sin cobrárnoslas. De postre compartimos una quesada casera que estaba bastante seca y tiesa.