Tilbagemelding
Bidrage med feedbackPulpo chicloso, porciones escasas y precios elevados para la mala calidad. No regresaremos nunca más a este lugar.
¡Qué camarera tan horrible! Le pregunté si había una mesa y su respuesta fue muy grosera y mal educada, a lo que respondí sarcasticamente agradeciéndole por contestar de manera tan agradable y simpática. ¡La gente quedó sorprendida! Así va mal en la vida con lo fácil que es ser amable.
Fuimos atendidos por un hombre mayor, canoso. No nos dio la oportunidad de pedir, ya que no miraba ni escuchaba. Después de pedir albóndigas y empanadas porque la mayoría de los platos de la carta no estaban disponibles, según él), a los 20 minutos nos dijo, de muy malas formas, que no había. No sabíamos de esto en ese momento y, después de esperar un rato, expresamos nuestra queja por el servicio recibido. Entonces, sorprendentemente, el camarero trajo un plato de albóndigas diciendo que se habían quedado en la olla y que los cocineros no se habían dado cuenta, lo cual nos pareció aún peor. Para colmo, vimos a una pareja recién sentada con un plato de ensaladilla, que supuestamente estaba agotada desde hacía tiempo, según el camarero. Si eso no fuera suficiente, al recibir la cuenta descubro que el vino que me sirvieron no era el que había pedido algo normal, considerando que aún con solo 3 mesas, el camarero ni siquiera se molestó en mirarte. Es una lástima que haya gente con ganas de abrir negocios y que este sea tan pésimo esté abierto.
Todo muy caro. Las raciones eran pequeñas. En la terraza tardan mucho. Se les ve siempre dentro de la barra riéndose o bebiendo una cerveza en vez de estar atentos a los comensales. Ha bajado mucho la cantidad,muy caro y poca cantidad. No volveremos a ir
Todo cerrado y nos sentamos aquí a desayunar. Una copita de zumo de naranja, un Aquarius y un mollete con jamón 6,80€. Si sois de afuera que sepáis que en San Fernando se desayuna mejor por mucho menos.