Fonda Casa Llarc - Puente de Montanana

1 hora y 45 minutos tardaron en empezar a servirnos una a ensalada de rulo de cabra y un trozo de longaniza muy picante con unas pocas de patatas y una triste cuajada, 17 euros.... Había 3 platos de segundo y no les quedaba nada nos dieron la longaniza... Los niños una hamburguesa que no les gustó y a otro niño un plato combinado de huevos que no nos hicieron xq no querian complicar a la cocinera, nos dijeron y ensalada con lomo fino como el papel de fumar q no se lo pudo comer el niño de salado q estaba... la ensalada, tampoco se la pusieron. La camarera no paró de disculparse todo el rato pero nos hizo perder el tiempo el dinero y el apetito... Una pena

Es un restaurante pequeño pero que se come bien. Las judías con oreja de cerdo, la escudella catalana y la galta rustida que probamos estaban muy buenas. Los postres también muy ricos.

Alguna vez, cuando Isidro tiene cerrado, hemos parado en Casa Llarc. La verdad es que la dueña no es Miss Simpatía. Falta un repaso por Mr. Proper y no supera la prueba del algodón. El ambiente es frío e impersonal. La comida no es inaceptable. Para una emergencia .... y punto.

Paramos a comer subiendo al Valle de Arán, menú de 17€ Macarrones hechos al momento como en casa, cordero brasa buenísimo, flan casero y vino, mesa al sol, una delicia ,no se puede pedir más, por cierto, ni caso a las opiniones de gente amargada que lleva su mal carma de su miserable vida laboral y personal allí donde va. Lo recomiendo 1000 por .

1 hora de espera y después nos ponen comida en mal estado. Macarrones con pelos de bayeta (plato que tuvieron la “decencia” de no cobrarnos).