Taberna Marisma

Fuimos a comer el fin de semana y todo lo que pedimos estaba espectacular, las berenjenas y las puntillas las disfrutamos especialmente, trabajan muy bien los rebozados sin gluten.Es un gustazo que toda la carta sea sin gluten y cocinen tan bien.La camarera un verdadero encanto y el tiempo de espera fue mínimo,así que a pesar de tener que cruzarnos toda Valencia, volveremos sin dudarlo.Lo único que quizá eché de menos ,fueron platos de verduras a la plancha o ensaladas más básicas.

Buenas tapas, mousse de chocolate óptimo, buena atención. Conozco la taberna desde hace muchos años y han ido cambiando de carta, hoy en día es sencilla pero no mediocre. Eso sí, los baños necesitan un buen lavado de cara.

Tasca o taberna Marisma, un clásico si estás por la playa de El Puig. Regentan también el restaurante junto a la taberna. He ido muchas veces pero nunca había hecho reseña. Abierto hace muchísimos años, se han ido adaptando. En la actualidad la relación precio calidad cantidad normal tirando a altos. En la taberna sirven tapas, bocadillos y platos muy correctos, depende de la época del año puede resentirse el servicio por la afluencia de público. Pero en general bien. Terraza y comedor interior amplio, algo ruidoso cuando hay mucha gente (normal). Hoy 8 de octubre no hay muchos comensales. Comida sencilla en terraza para dos personas, hemos pedido: Puntilla (buena), hamburguesa Marisma (muy buena) y con pan de verdad !! (un 10), chuletas de cordero (normal) pero muy bien servidas con verduras variadas estupendas. Agua de cristal, del tipo filtrada de máquina in-situ, todo un acierto para reducir plásticos, me gusta esta opción que tantos restaurantes están cogiendo. Café de calidad. Servicio rápido, simpatía y profesionalidad. Mesa correcta, limpieza. También te lo ponen para llevar. En general todo bueno, lástima las chuletas... prefiero a la brasa, mas tostaditas, y así te las comes todas. WC (7 10), jabón y toallas.

Estuvimos comiendo el pasado domingo después de haber llamado para reservar en el restaurante Noray, del mismo propietario y justo al lado, pero por recomendación de la persona que nos atendió comimos aquí, nos dijo que había menú por 12,90 y resulta que no tienen desde hace tiempo. El arroz del senyoret muy flojo, esperábamos otra cosa. No debimos hacer caso y comer en el Noray, aunque nos hubiese costado más caro. Poco servicio para tanta gente, sólo dos camareras. Era mi cumpleaños y salí decepcionada por 69€.

Hemos estado cenando esta noche. Los calamares, las tellinas y el entrecot estupendos. El servicio, muy bien. RCP buena. Para repetir