El Ocho - Cuauhtémoc

LO MALO: **La comida y la bebida tienen una gran área de oportunidad. Éramos una mesa de 6, todo lo que pedimos estaba de aceptable a feo y uno de mis amigos se intoxicó con el pastel de chocolate. La margarita de mango insípida y fea. Nos trajeron 4 vasos sucios. Es caro para lo que sirven.** LO FEO: **Se llena demasiado y solo tienen 1 baño. Esto puede resultar incómodo porque haces fila para el baño. Otro detalle que no cuidan es que hay alcohol porque es un bar y está lleno de niños. Eso resulta muy raro porque de repente el ambiente no es familiar y hay niños viendo/escuchando. Yo le tenía un gran recuerdo y me decepcionó. El concepto es maravilloso pero están descuidando los detalles.**

El lugar es bastante entretenido, la comida es suficiente para pasar el rato y las bebidas están buenas, pero el servicio deja mucho que desear. No puede ser que al pedir un frappé se tarden casi una hora, además de que no tenían todos los postres disponibles y la explicación que me dieron fue bastante mala. A pesar de esto, cuando es hora de cobrar van rápidos. Recomiendo ir con ciertas reservas en cuanto a su servicio. Actualización: solo dejé propina porque iba acompañado, pero no iba a hacerlo. Aunque pagué con tarjeta y pedí que la cerraran, el mesero aún me preguntó si dejaría propina, lo cual resultó molesto.

Venimos al menos una vez al mes, y los desayunos son deliciosos, pero la falla de hoy domingo 14-01-24 fue que la vajilla estaba sucia. Deben prestar más atención a este detalle que es muy importante.

Los amo, tiene todo tipo de juegos, venden comida, malteadas, bebidas alcohólicas, es económico y muy padre el concepto, bueno para ir a trabajar o a una velada de amigos.

Excelente para pasar el rato, puedes cambiar de juego las veces que quieras y siempre te atienden amablemente.