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Bidrage med feedbackEspectacular. Venimos a comer, sin reserva y por casualidad. la mujer que nos recibió un 10, para el tratamiento de la simpatía y la paciencia. Queríamos una terraza, pero al final nos sentamos dentro. Creo que un éxito porque disfrutamos más de la comida. Estamos pidiendo las picaduras, genial. Fueron tostados en el exterior y jugosos en el interior, y con el yuca el contrapunto perfecto. entonces el arroz meloso de pato y foie. sabor fantástico con todo el grano. postres caseros, muy ricos. mantel y servilleta de tela, un punto más por favor. Teníamos el café en la terraza y tenemos que volver de noche. añadido a los favoritos.
Altea, es un lugar muy especial. pero el descubrimiento de @restaurantelaclaudiaaltea, me ha sorprendido, por . la calidad de los platos, por la limpieza de los locales, por las vistas, impagables y por el servicio. Eres genial, Joaquina y Elia. arroz meloso con musola, codmar y camarones rojos. de lagrima, luego un carpaccio de camarones rojos con erizos de mar, que quita el sentido. un gazpacho en un recipiente superoriginal, y postres. Todavía lloro. panacotta al romero, es celestial y la armonía de los chocolates a dos temperaturas, es sabor puro, y un corte con su espolvor, gracias por todo, seremos de hoy sus clientes fieles, en las próximas visitas a Altea,
Un restaurante muy acogedor con una terraza que tiene las mejores vistas en altea. servicio super amable. el arroz meloso de camarones era delicioso. Calidad / precio muy bueno
Ibamos con las altas expectativas para las vistas y el bonito del lugar, pero bajaron rápidamente tan pronto como llegó el primer plato. en general bueno pero la cantidad de relación / calidad / precio muy caro considerando que ya habíamos visitado otras artes cercanas. la vista nunca puede sacudirlos. el servicio también nos decepcionó, comentarios y actitudes poco profesionales tanto con nosotros como con otros clientes. Vivimos en la secundaria y no volveremos.
Gran descubrimiento gastronomico en Altea. A 50 metros de la Iglesia con maravillosas vistas desde su terraza. Kike el mago de los fogones en la cocina y Joaquina su pareja derrochando profesionalidad y simpatia en la sala. Platos con mucha creatividad y perfectamente elaborados lo que hacen de este restaurante uno de los mejores de la zona. Muy recomendable. Volveremos tan pronto como nos sea posible.